Existe una gran variedad de representaciones de camélidos en el arte cerámico de Ciénaga. En su mayoría corresponden a la técnica de incisión, pero también se han registrado diseños pintados.

Presentan gran variabilidad en los diseños de las partes constituyentes de las cabezas, pescuezo, lomo, extremidades y cola. Al respecto pueden presentarse con orejas puntiagudas o rectangulares, con o sin dientes, con el hocico mirando a la derecha o a la izquierda. En relación con los pescuezos, éstos son barras verticales u oblicuas. Los lomos adquieren formas rectangulares, triangulares o trapezoidales. Las extremidades pueden estar presentes o ausentes. En el primer caso pueden representarse extendidas o flexionadas y estar orientadas a la derecha o a la izquierda. Finalmente, las colas pueden o no estar representadas, en cuyo caso pueden ser rectilíneas o curvilíneas y dibujadas hacia la izquierda o hacia la derecha. Los camélidos pueden estar rellenos de puntos, círculos o líneas paralelas, o pueden no presentar relleno. Estas figuras pueden presentarse solas o combinadas con representaciones antropomorfas. En algunos casos la figura de los camélidos se simplifica al punto de resultar prácticamente irreconocible, ya que se representa solo por la estilización del pescuezo y la cabeza.